• FGR vincula a Herrera Reza y Coprolac en lavado en Segalmex.
• Vilma Cristina Herrera Reza se encuentra implicada en una operación inmobiliaria.
• Implica una presunta colaboración entre altos funcionarios y empresarios para obtener beneficios ilícitos.

La Fiscalía General de la República (FGR) está llevando a cabo una exhaustiva investigación por delincuencia organizada y lavado de dinero que involucra a la familia de René Gavira Segreste, exfuncionario de Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex). En el centro de esta pesquisa se encuentra Vilma Cristina Herrera Reza, hermana de Carlos Herrera Reza, dueño de Comercializadora de Productos Lácteos de la Laguna (Coprolac), una de las empresas señaladas en este escándalo.

La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), bajo la dirección de Pablo Gómez, ha presentado denuncias ante la FGR contra varios miembros de la familia de Gavira Segreste, incluyendo a Emma Martínez Martínez, esposa del exfuncionario, y sus hijos René Federico y Kenji Iván Gavira Martínez, así como María Cristina Vilchis Carbia, esposa del primero de ellos. Sin embargo, uno de los nombres más destacados en esta investigación es el de Vilma Cristina Herrera Reza, quien se encuentra implicada en una operación inmobiliaria que presuntamente sirvió como «moche» para obtener contratos de Segalmex.

Según los informes de la UIF, Herrera Reza habría participado en la simulación de la venta de un departamento en San Antonio, Texas, a René Federico Gavira Martínez, hijo de Gavira Segreste, como parte de un supuesto acuerdo para favorecer a Coprolac en la obtención de contratos millonarios con Segalmex. Esta revelación ha generado un gran revuelo en el ámbito empresarial y político, pues implica una presunta colaboración entre altos funcionarios y empresarios para obtener beneficios ilícitos.

COLABORARÁN COMO TESTIGOS EN ESTE CASO

Herrera Reza y Juan Carlos Burillo González, apoderado legal de Coprolac, han decidido colaborar con las autoridades como testigos en este caso. Ambos han afirmado que el departamento en San Antonio no fue una operación de compraventa legítima, sino más bien un intercambio por los contratos obtenidos con Segalmex. La FGR estima que Coprolac habría desfalcado a Segalmex por más de mil millones de pesos, lo que representa un grave caso de corrupción y malversación de fondos públicos.

Además de las acusaciones contra Herrera Reza y su familia, las investigaciones han revelado que los hijos de Gavira Segreste tienen participación en más de 30 empresas, especialmente en el sector de la televisión por cable. Estos hallazgos apuntan a una red de corrupción y lavado de dinero que se extiende a través de diversos sectores de la economía, lo que ha generado preocupación entre las autoridades y la sociedad en general.

En resumen, la investigación de la FGR sobre el presunto lavado de dinero en Segalmex ha sacado a la luz una red de corrupción que involucra a empresarios, funcionarios públicos y diversas empresas. El caso sigue en desarrollo y se espera que se revelen más detalles en los próximos días, lo que podría tener importantes repercusiones en el ámbito político y empresarial del país.