• Éxito en la Feria Internacional del Libro de Monterrey.
• Según los organizadores, la FIL de Monterrey se distingue por tener el mayor gasto en libros por persona en México.
• Las grandes editoriales, por su parte, también reportan un auge en las ventas.

Salvador López, gerente de la librería de la editorial Tilde, se encontraba el pasado martes muy satisfecho en la Feria Internacional del Libro (FIL) de Monterrey, un evento consolidado como uno de los principales encuentros literarios de México.

A pesar de competir con gigantes como Planeta y Random House, Tilde ha logrado destacar, ofreciendo una selección de libros que impulsa la literatura norteña, particularmente aquella relacionada con la frontera con Estados Unidos.

«La feria nos da mucha visibilidad», comentó López. «Hay gente que no conocía nuestra librería ni la editorial, y aquí saben que pueden encontrar literatura de calidad». A pesar de las expectativas de que el evento podría verse afectado por el feriado nacional por la toma de posesión de la presidenta Claudia Sheinbaum, el lugar se llenó de visitantes, superando las previsiones de los libreros. «Las ventas han estado muy bien; la gente busca nuestros libros», agregó.

Según los organizadores, la FIL de Monterrey se distingue por tener el mayor gasto en libros por persona en México, con un promedio de 800 pesos (alrededor de 40 dólares) por visitante, superando incluso a la FIL de Guadalajara. Esta feria no solo atrae a un público ávido de superación personal, con títulos como Hábitos atómicos de James Clear, sino que también ofrece espacio para obras de ficción de calidad.

López destacó la importancia de promover voces que podrían ser opacadas por la literatura más canónica. Tilde ha logrado éxitos editoriales con obras como La estructura de Andrómeda de Joaquín Hurtado, una novela experimental que aborda temas complejos como la sexualidad infantil y el sida. Además, la editorial está lanzando una nueva colección titulada Fronteridades, que incluirá poesía, ensayo y narrativa.

Las grandes editoriales, por su parte, también reportan un auge en las ventas. Pedro Antonio Roque, asesor de Editorial Planeta, compartió que las ventas han superado las expectativas, con un notable interés por los libros de grandes autores mexicanos y una renovada edición de obras de José Emilio Pacheco.

Antonio Solares, de Océano, expresó su satisfacción por el movimiento en su pabellón. «Aún no llegamos a la mitad de la semana y ya hemos vendido mucho», afirmó, mencionando que Este dolor no es mío, un ensayo psicológico, es uno de los más comprados.

AFLUENCIA DEL PÚBLICO CONSTANTE

En el pabellón del Fondo de Cultura Económica (FCE), la afluencia de público fue constante. «Es la gran oportunidad de ventas del año para los libreros del norte de México», comentó Juan Carlos Ramos, jefe de la delegación de la FCE en Monterrey. Con casi 3,000 libros vendidos hasta el martes, se prevé que superen las cifras del año anterior, cuando vendieron más de 10,000 ejemplares.

Los organizadores de la FIL de Monterrey han trabajado para posicionar este evento como un encuentro literario de importancia internacional. Con el respaldo del Tecnológico de Monterrey y diversas empresas locales, buscan romper con la imagen de Monterrey como una ciudad no abierta a las artes.

Carmen Junco de la Vega, presidenta de la FIL, comentó: «Queremos potenciar las industrias creativas a través del libro». Este año, la Universidad Autónoma de México (UAM) es la invitada de honor, con un pabellón que exhibe más de 2,000 títulos.

Las ferias del libro se han convertido en un elemento clave para revitalizar la industria editorial en México, ofreciendo a los lectores acceso a una amplia variedad de títulos y una oportunidad única para los editores. «Para nosotros, este año ha sido un estallido de ventas», concluyó Marco Moctezuma, subdirector de distribución de la UAM, satisfecho con la respuesta del público.

La FIL de Monterrey se extenderá hasta el fin de semana, y se espera que continúe atrayendo a un público entusiasta, listo para invertir en la rica tradición literaria que representan los libros.