• El Fresno Eugenio: testigo de la historia de la CDMX.
• La historia de Eugenio se entrelaza con la evolución de la colonia del Valle.
• Símbolo de resistencia.

En una esquina emblemática de la colonia del Valle, entre una taquería al norte y una farmacia al sur, yergue majestuoso Eugenio, un fresno de más de 150 años de edad, testigo silencioso de los avatares históricos de la capital mexicana.

Con sus más de 30 metros de altura, este árbol de la especie Frazinus udhei Wenz, conocido popularmente como fresno, declarado patrimonio cultural por el Gobierno de Ciudad de México, en un esfuerzo por preservar su singularidad y el ecosistema que sostiene.

Vecinos de la colonia del Valle se movilizaron el 24 de octubre de 2023 para proteger a Eugenio de los planes de una constructora que pretendía talarlo para abrir paso a un proyecto inmobiliario. Gracias a esta presión comunitaria, respaldada por la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda y las secretarías de Cultura y Medio Ambiente (Sedema), se emitió un decreto que establece medidas de protección y un Plan de Manejo para asegurar la supervivencia del árbol.

Según el comunicado oficial, Eugenio no solo es crucial para el ecosistema local, sino que también alberga una rica diversidad de fauna, desde pájaros carpinteros y palomas hasta ardillas y zarigüeyas. Además, sirve como corredor para aves rapaces como halcones y aguiluchos, destacándose como un punto clave de interacción entre la flora y fauna urbana.

HISTORIA

La historia de Eugenio se entrelaza con la evolución de la colonia del Valle, antaño conocida como la Hacienda de San Francisco de Borja, habitada por jesuitas desde 1510 hasta 1683. Después de la expulsión de la compañía de Jesús a finales del siglo XVIII, los terrenos cambiaron de manos y nombres varias veces, hasta que en el siglo pasado la empresa Nueva Colonia del Valle S.A. adquirió la tierra donde emergió Eugenio alrededor de 1874.

Desde entonces, este árbol, testigo de los nueve períodos presidenciales de Porfirio Díaz, el estallido de la Revolución Mexicana, y los largos años del PRI en el poder, hasta los tiempos actuales que ahora enfrentan el desafío de la preservación ambiental y el cambio climático.

Con la implementación del Plan de Manejo, la Sedema asegura que Eugenio continuará siendo un ícono cultural y natural, proporcionando a las generaciones futuras un vínculo tangible con la historia viva de la ciudad de México. Esta medida no solo subraya el compromiso del Gobierno capitalino con la conservación ambiental, sino que también resalta la importancia de la participación ciudadana en la protección de los recursos naturales urbanos.

Así, Eugenio se prepara para existir no solo durante el presente sexenio, sino para seguir siendo un símbolo de resistencia verde en la futura metrópolis que se gesta en la historia de México.