- Las semillas: beneficios y posibles riesgos de su consumo.
- Un consumo excesivo o en personas con ciertas condiciones de salud puede tener efectos negativos.
- Contienen lectina, una proteína que en algunos casos puede irritar el revestimiento intestinal.
Aunque las semillas son bien conocidas por sus beneficios nutricionales, como ser ricas en minerales, vitaminas y grasas saludables, es fundamental consumirlas con moderación y precaución en algunas situaciones.
Un consumo excesivo o en personas con ciertas condiciones de salud puede tener efectos negativos en el organismo.
A continuación, te explicamos las principales contraindicaciones que debes tener en cuenta:
1. El ácido fítico y su impacto en la absorción de nutrientes
Una de las principales preocupaciones con el consumo excesivo de semillas es su contenido de ácido fítico. Esta sustancia puede interferir en la absorción de minerales importantes como el hierro, calcio y zinc, algo que puede ser especialmente problemático para personas con deficiencias nutricionales o un sistema inmunológico debilitado. Según Mayo Clinic, el consumo elevado de ácido fítico podría dificultar la absorción de nutrientes esenciales.
2. Semillas y diverticulosis: ¿Deberían evitarse?
Aunque tradicionalmente se recomendaba que las personas con diverticulosis evitaran las semillas por temor a que sus pequeñas partículas se alojaran en los divertículos y causaran inflamación o diverticulitis, la ciencia actual no respalda completamente esta creencia. Sin embargo, es prudente que quienes padecen esta afección monitoricen su reacción a las semillas y consulten a su médico si notan algún malestar.
3. La lectina y la inflamación intestinal
Las semillas contienen lectina, una proteína que en algunos casos puede irritar el revestimiento intestinal, lo que podría desencadenar inflamación. Aunque no todas las personas son sensibles a la lectina, quienes padecen trastornos gastrointestinales o inflamatorios deben estar atentos a cualquier malestar tras el consumo de semillas y considerar reducir su ingesta si notan molestias.
4. Semillas y aumento de peso
A pesar de sus beneficios, las semillas son alimentos calóricos debido a su alto contenido de grasas saludables. Un consumo desmedido puede resultar en un aporte calórico excesivo, contribuyendo al aumento de peso si no se ajustan las porciones adecuadamente. Para equilibrar los beneficios y evitar un exceso de calorías, se recomienda limitar su ingesta a una cucharada diaria.
5. ¿Es necesario activar las semillas?
Para mejorar la absorción de nutrientes y reducir los efectos del ácido fítico, muchos expertos recomiendan «activar» las semillas, es decir, remojarlas en agua durante varias horas. Este proceso facilita la digestión y puede ser especialmente beneficioso para personas con dificultades para absorber minerales o que experimentan molestias digestivas tras consumirlas.
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