Claudia Sheinbaum y el inicio de una nueva era política en México. Sus principales desafíos serán combatir la criminalidad y reducir la pobreza, sin caer en el triunfalismo ni abusar de su mayoría parlamentaria.

NUESTRA OPINIÓN

Este martes, México abrió un nuevo capítulo en su historia con la toma de posesión de Claudia Sheinbaum como presidenta. La primera mujer en ocupar la silla presidencial llega con un mandato abrumador y una serie de retos que definirán su gestión.

Con el respaldo de una contundente mayoría en las urnas y en el Congreso, Sheinbaum tiene en sus manos un poder político sin precedentes.

Sin embargo, ese poder debe ser manejado con cautela y responsabilidad, para atender los principales problemas que enfrenta el país: la pobreza y la criminalidad.

Un Desafío Urgente: La Seguridad

Uno de los retos más grandes que Sheinbaum deberá afrontar desde el primer día es la seguridad. El narcotráfico y la violencia han dejado una huella profunda en México, y la nueva presidenta ha declarado que combatir la pobreza es el primer paso para reducir la criminalidad.

Sin embargo, este enfoque, aunque válido, debe ir acompañado de un refuerzo de las instituciones de seguridad y la creación de un pacto que involucre a todos los actores políticos.

1. Restablecer el Estado de derecho: Es fundamental que el gobierno recupere el control de los territorios dominados por el crimen organizado. Esto requerirá una fuerte inversión en las fuerzas de seguridad y en el sistema judicial.
2. Pacto Nacional contra la Violencia: La violencia no distingue entre partidos. Sheinbaum debe convocar a todas las fuerzas políticas para lograr un acuerdo que trascienda los intereses partidistas y se enfoque en reducir la violencia en el país.

Lucha contra la Pobreza y el Crecimiento Económico

La lucha contra la pobreza, iniciada por su predecesor Andrés Manuel López Obrador, será un pilar central en el gobierno de Sheinbaum. Pero para consolidar esos avances y evitar una desaceleración económica, la presidenta deberá adoptar medidas que impulsen la productividad y fortalezcan la confianza en México como un destino atractivo para los inversionistas extranjeros.

1. Elevar la productividad: Para que México siga creciendo, es necesario mejorar la eficiencia y competitividad de sus industrias.
2. Reducción del déficit: Un manejo adecuado del presupuesto permitirá a México mantener su estabilidad económica, sin poner en riesgo los avances sociales.
3. Confianza de inversionistas extranjeros: Atraer inversiones será clave para la generación de empleo y el crecimiento económico.

La Controversia de la Reforma Judicial

Uno de los puntos más polémicos del nuevo gobierno será la reforma judicial, que propone someter la elección de jueces al voto popular a partir de 2025. Si bien esta medida tiene la intención de hacer más transparente el sistema judicial, también podría abrir la puerta a la corrupción y el clientelismo, problemáticas que han sido históricamente comunes en México. Es necesario que Sheinbaum maneje esta reforma con sumo cuidado y evite que se convierta en una herramienta para intereses partidistas.

Evitar el Triunfalismo y Gobernar para Todos

El amplio margen de poder con el que cuenta la presidenta Sheinbaum puede ser un arma de doble filo. Si bien tiene la oportunidad de liderar con fuerza, también debe evitar caer en la tentación de usar su mayoría parlamentaria para imponer unilateralmente su agenda. Escuchar a todas las voces, incluso a aquellas que no comulgan con su proyecto, será esencial para construir una democracia más sólida.

Es el momento de que Sheinbaum cumpla con las expectativas depositadas en ella. Con su experiencia y honestidad, tiene todo el potencial para liderar un gobierno exitoso. Pero para lograrlo, deberá ser inclusiva, dialogante y mantener su enfoque en las verdaderas prioridades del país.