• Luis Fernando Figari expulsado del Sodalicio de la Vida Cristiana
• El Sodalicio ha estado envuelto en constantes acusaciones de abusos sexuales
• as denuncias de abuso comenzaron en 2001, pero durante años fueron desestimadas.

Luis Fernando Figari, fundador del Sodalicio de la Vida Cristiana (SVC), ha sido expulsado de la congregación que fundó en 1971, en un movimiento significativo por parte del Vaticano.

Figari, al igual que el mexicano Marcial Maciel, fundador de los Legionarios de Cristo, ha sido uno de los mayores depredadores sexuales en la historia reciente de la Iglesia Católica.

Bajo el manto de un carisma cuestionable, el Sodalicio ha estado envuelto en constantes acusaciones de abusos sexuales, abuso de poder y blanqueo de capitales.

Las Investigaciones y la Expulsión

Las denuncias de abuso comenzaron en 2001, pero durante años fueron desestimadas. La situación dio un giro importante cuando los periodistas Paola Ugaz y Pedro Salinas investigaron a Figari y al Sodalicio, revelando una trama de abuso sexual y corrupción económica. Su investigación, titulada Mitad monjes, mitad soldados, casi los llevó a la cárcel.

En 2024, la Santa Sede encargó una investigación especial a los colaboradores del Papa Francisco, Charles J. Scicluna y Jordi Bertomeu. La investigación confirmó que Figari había abusado de menores antes de fundar el Sodalicio, lo que llevó a la decisión histórica de expulsarlo. Fuentes cercanas al Vaticano afirmaron que “no se sostiene que Dios entregara un carisma fundacional a un depredador”.

Reacciones y Próximos Pasos

La Conferencia Episcopal Peruana anunció la expulsión de Figari a través de un comunicado. Según el decreto del Dicasterio para la Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, Figari fue expulsado debido a actuaciones “incompatibles e inaceptables” para un miembro de una institución de la Iglesia. La decisión busca restaurar la justicia y proteger el bien de los fieles y de la Iglesia.

La investigación vaticana comenzó en julio de 2023, a partir de los informes de Ugaz y Salinas. La Santa Sede envió a Scicluna y Bertomeu con un mandato para investigar y presentar un informe sobre el caso del Sodalicio. El informe provocó la renuncia del arzobispo de Piura, José Antonio Eguren, por encubrir abusos. Aunque el Sodalicio admitió algunos abusos y expulsó a algunos colaboradores de Figari, la Fiscalía peruana archivó las denuncias debido a la imposibilidad de extraditar a Figari.

Respuesta del Sodalicio

El actual superior del Sodalicio, José David Correa, justificó que en 2019 solicitó la expulsión de Figari al Papa. Correa enfatizó que Figari “no es un referente espiritual” para la comunidad. Sin embargo, esta declaración se interpreta como un intento final por evitar la disolución completa del Sodalicio, que parece ser el siguiente paso necesario por parte del Vaticano.