- Justin Trudeau dimite como primer ministro de Canadá.
- También dejará de ser la cabeza del Partido Liberal.
- Permanecerá en su puesto hasta que se elija un nuevo sucesor.
Justin Trudeau, primer ministro de Canadá, ha confirmado este lunes su dimisión tanto del liderazgo del Partido Liberal como de su cargo como primer ministro del país, en medio de una creciente crisis interna y una notable caída en su popularidad. Aunque dejará de ser líder del partido, permanecerá en su puesto hasta que se elija un nuevo sucesor, proceso que iniciará con la creación de un sólido proceso competitivo a nivel nacional, tal y como declaró en una conferencia desde su residencia en Ottawa.
Trudeau, quien asumió el liderazgo de los liberales en 2013 y llevó al partido a la victoria en 2015, gobernó Canadá con un enfoque progresista que promovía los derechos de las mujeres y la lucha contra el cambio climático. Sin embargo, en los últimos meses, el mandatario enfrentó una creciente presión tanto de su propio partido como de la oposición, especialmente después de una serie de conflictos internos, como la disputa con su aliada y ministra de Finanzas, Chrystia Freeland. La falta de apoyo a sus propuestas de aumentar el gasto público y su posterior dimisión de Freeland contribuyó a su debilitada posición.
El anuncio de su dimisión llegó tras un periodo en el que más de dos docenas de legisladores liberales y varias agrupaciones regionales pidieron su salida. A ello se sumaron los continuos llamados de la oposición y la amenaza de una moción de no confianza, lo que dejó claro que Trudeau ya no contaba con el respaldo necesario para continuar al frente del Gobierno. Aunque su dimisión parece inevitable, el político subrayó que el país necesita una opción fuerte para las próximas elecciones, previstas para octubre de este año.
Candidatos
Dentro del Partido Liberal, varios nombres se barajan como posibles sucesores, entre ellos Chrystia Freeland, el ministro de Finanzas Dominic LeBlanc y el exgobernador del Banco de Canadá, Mark Carney. La decisión sobre el nuevo liderazgo podría traer consigo una recalibración de la política canadiense y una respuesta más efectiva a los desafíos económicos y geopolíticos que enfrenta el país.
La dimisión de Trudeau también refleja los múltiples desafíos a los que se ha enfrentado Canadá bajo su liderazgo. Desde la humillación pública por parte del expresidente Donald Trump hasta los problemas internos generados por la pandemia y la crisis económica, el Gobierno de Trudeau ha sido objeto de numerosas críticas. El enfriamiento de la economía, el aumento de precios y la presión sobre el mercado inmobiliario han golpeado duramente la popularidad del primer ministro, que ahora se encuentra al final de su carrera política.







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