En una declaración contundente, el gobernador de Nuevo León, Samuel García, ha anunciado medidas radicales para abordar los alarmantes niveles de contaminación del aire en la región, incluyendo la búsqueda de soluciones específicas dirigidas a la refinería de Pemex en Cadereyta.

Esta decisión surge luego de que García revelara que su hija Mariel ha experimentado afectaciones en su salud debido a la contaminación atmosférica.

«Refinería vamos por ustedes, no me importa el costo político», expresó el mandatario estatal a través de sus historias en Instagram.

García destacó que su administración no tolerará más este problema y está decidida a tomar medidas drásticas, incluso si ello implica enfrentar consecuencias políticas adversas.

«Yo no quiero volver a ver a mi niña con enfermedades respiratorias porque no fuimos lo suficientemente duros», añadió.

Las medidas propuestas por García abarcan una amplia gama de fuentes de contaminación, desde la refinería de Pemex hasta las pedreras y los vehículos.

Se comprometió a cerrar todas las pedreras contaminantes y a aplicar estrictas regulaciones a la industria, asegurando que cualquier entidad que esté contribuyendo significativamente a la contaminación será clausurada sin excepciones.

El gobernador emecista resaltó la obtención de una suspensión definitiva en un juicio de amparo que les permitirá llevar a cabo inspecciones conjuntas en instalaciones como la planta Héctor R. Lara Sosa.

Asimismo, prometió integrar la industria bajo jurisdicción federal al Programa Integral de Gestión de Calidad del Aire (Pigeca), con el objetivo de asegurar una reducción significativa en los niveles de contaminación.

Samuel García contra contaminación

En cuanto a las medidas específicas, García mencionó la implementación de incentivos para fomentar el uso del transporte público, como la entrega de saldo para viajes gratis en rutas urbanas como Ecovía, Transmetro y el sistema Metrorrey.

Esta iniciativa busca alentar a los automovilistas a optar por formas más sostenibles de transporte y reducir así la cantidad de vehículos en las carreteras.

«Vamos a atacar de manera muy agresiva, no me importa el costo ni político ni económico», afirmó García.

Su determinación para abordar este problema de manera decisiva refleja su compromiso con el bienestar de los ciudadanos de Nuevo León, especialmente de los más vulnerables, como los niños que sufren las consecuencias de la contaminación atmosférica.

En resumen, las medidas anunciadas por el gobernador Samuel García representan un paso significativo hacia la mejora de la calidad del aire en Nuevo León y demuestran un firme compromiso con la salud y el bienestar de la población.

Sin embargo, queda por verse cómo se implementarán estas medidas y cuál será su impacto a largo plazo en la región.