- Migrantes abandonados en Veracruz.
- Cuando fuerzas de seguridad federales y estatales descubrieron los vehículos turísticos.
- La intervención de las autoridades no solo salvó vidas, sino que también proporcionó atención médica.
En un dramático rescate humanitario, las autoridades mexicanas han salvado a 407 migrantes que se encontraban abandonados en tres autobuses a lo largo de la autopista La Tinaja-Cosoleacaque, en el sur de Veracruz.
El hallazgo tuvo lugar el martes, cuando fuerzas de seguridad federales y estatales descubrieron los vehículos turísticos.
Tras una exhaustiva revisión, se encontraron 407 extranjeros abandonados, todos ellos sin documentación que acreditara su estancia regular en el país, según confirmó el Instituto Nacional de Migración (INM).
La intervención de las autoridades no solo salvó vidas, sino que también proporcionó atención médica a todos los rescatados.
El rescate no estuvo exento de angustia. Entre los migrantes se encontraba una mujer hondureña en estado de gestación, acompañada por su hija menor, un hombre y otra persona de nacionalidad ecuatoriana.
Inmediatamente llevaron a estos cuatro individuos al Hospital General de Cosoleacaque para recibir atención especializada.
Migrantes abandonados en Veracruz
Los países de origen de estos migrantes varían ampliamente, abarcando siete naciones de América Central y del Sur. Un total de 91 personas viajaban en núcleos familiares, incluyendo 30 mujeres, 15 hombres y 46 menores de 18 años.
Además, encontraron a 52 niñas, niños y adolescentes sin la compañía de adultos.
Según datos proporcionados por las autoridades migratorias, de las 264 personas adultas que viajaban solas, se identificó que 12 eran de Cuba, 4 de República Dominicana, 27 de Ecuador, 187 de Guatemala, 7 de Honduras, 21 de El Salvador y 6 de Nicaragua.
El personal llevó a este grupo a la estación migratoria de Acayucan para procesarlo correctamente.
Los trabajadores llevaron a los núcleos familiares y a los menores no acompañados al albergue del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) de Jáltipan.
Los migrantes han proporcionado testimonios que revelan una situación desesperada: muchos afirmaron que los conductores los abandonaron durante varias horas, sin agua ni alimentos, después de huir durante la noche anterior.
El miedo los obligó a permanecer en los autobuses hasta que finalmente fueron encontrados. Además de la deshidratación, los rescatados presentaban signos de estrés severo, producto de la incertidumbre y el abandono sufridos en su peligroso viaje hacia el norte.
Este dramático rescate resalta la vulnerabilidad de los migrantes que atraviesan México en busca de una vida mejor, así como la necesidad de medidas humanitarias y de protección para salvaguardar sus derechos y su seguridad en el camino.
En un mundo cada vez más globalizado, es esencial abordar estas crisis con empatía y solidaridad.
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