Un estudio realizado por el Complexity Science Hub de Viena ha revelado que el narcotráfico es el quinto empleador en México, con entre 160,000 y 185,000 personas involucradas en sus filas. Según el estudio, la única forma de reducir la violencia relacionada con los cárteles en México es cortar el reclutamiento de nuevos miembros, ya que estos grupos criminales reclutan alrededor de 350 personas cada semana.

A pesar de los esfuerzos de las autoridades mexicanas para encarcelar a miembros de los cárteles, el tamaño de estas organizaciones ha aumentado en los últimos años.

El estudio revela que en 2022, los cárteles cuentan con aproximadamente 60,000 miembros más que en 2012, sumando un total de alrededor de 175,000 integrantes. Esto los coloca como el quinto empleador en México, por encima de empresas como Pemex y Oxxo, y solo superado por grandes corporaciones como FEMSA, Walmart, Manpower y América Móvil.

El estudio también proporciona datos sobre la distribución de miembros entre los diferentes grupos criminales, con el Cartel Jalisco Nueva Generación y el Cartel de Sinaloa siendo los más grandes en términos de membresía. Además, destaca que el 17% de las personas reclutadas por los cárteles mueren en un período de 10 años debido a la violencia.

El reclutamiento forzoso es una práctica común en estos grupos, lo que causa un gran sufrimiento a las familias de los desaparecidos.

El estudio sugiere que reducir a la mitad los reclutamientos podría tener un impacto significativo en la disminución del tamaño de los cárteles y, por lo tanto, en la reducción de la violencia relacionada con el narcotráfico en México.

Este estudio representa uno de los esfuerzos más ambiciosos para cuantificar la influencia y el poder de los grupos criminales en México y destaca la importancia de abordar el reclutamiento como una estrategia fundamental para combatir la violencia asociada con el narcotráfico en el país.