- Ken Salazar advierte sobre deportaciones masivas de migrantes.
- Trump ha reafirmado que una de sus principales prioridades será la inmigración.
- Salazar recordó que la discusión sobre los migrantes en situación irregular no es nueva.
La propuesta más polémica del futuro presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sobre la inmigración ha generado alerta no solo dentro del país norteamericano, sino también en México. La deportación masiva de inmigrantes, tanto legales como ilegales, ha puesto en riesgo la estabilidad en la frontera y ha encendido las alarmas sobre una posible crisis humanitaria y económica.
En medio de su ascenso hacia la presidencia, Trump ha reafirmado que una de sus principales prioridades será la inmigración, centrándose en la promesa de deportar a millones de personas. Aunque se hablaba de medidas similares desde la administración de George W. Bush, lo que ahora inquieta a expertos y gobiernos de ambos países es la efectividad de estas promesas y sus consecuencias inmediatas.
Ken Salazar, embajador de Estados Unidos en México, ha alertado sobre la seriedad de las declaraciones de Trump. En una reciente conferencia de prensa, Salazar subrayó que las deportaciones masivas podrían llevarse a cabo, basándose en las leyes vigentes y las promesas de campaña. Además, el diplomático dejó en el aire una importante cuestión: ¿qué pasará con la comunidad migrante, especialmente los millones de mexicanos que viven en situación irregular en Estados Unidos?
SITUACIÓN NO ES NUEVA
Salazar recordó que la discusión sobre los migrantes en situación irregular no es nueva. Desde los tiempos de la administración Bush, se ha hablado sobre el destino de los «miles de millones de migrantes», la mayoría mexicanos, que viven en la sombra de la sociedad estadounidense. Sin embargo, con Trump al mando, la pregunta ahora es: ¿cuántos de estos migrantes, tanto legales como ilegales, serán deportados bajo el pretexto de cumplir con sus promesas de campaña?
DEPORTACIÓN INCLUIRÁ A MIGRANTES LEGALES
El futuro presidente no se limita a los migrantes ilegales. Karoline Leavitt, portavoz de la campaña de Trump, confirmó que el plan de deportación masiva incluiría a migrantes legales, y los temores de que también se apunte a residentes legales crecen. Un tuit viral de Stephen Miller, asesor de Trump, reveló la intención de iniciar un proceso de «desnaturalización» de ciudadanos estadounidenses, lo que genera aún más incertidumbre sobre el futuro de miles de migrantes que, hasta ahora, tenían protección legal.
Este panorama de incertidumbre se intensificó con la controversia generada por un caso falso durante la campaña presidencial, en el que se acusaba a migrantes haitianos de cometer actos atroces. Aunque la historia desmentida como una fabricación racista, el presidente electo nunca abandonó su retórica xenofóbica, especialmente hacia los inmigrantes no blancos, lo que preocupa aún más a las comunidades latinoamericanas.
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