• Investigan si un transformador causó el incendio en Waldo’s.
• Dejó 23 muertos en un Waldo’s.
• El Gobierno estatal ordenó cerrar las 68 tiendas en el estado.

La Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora (FGJE) investiga si un transformador eléctrico fue la causa del incendio que el sábado dejó 23 personas muertas en una tienda Waldo’s ubicada en el centro de Hermosillo. Según la autoridad, 21 víctimas ya identificadas y dos personas —una joven de 20 años y un hombre de 81— permanecen en estado crítico.

De acuerdo con los primeros informes, el siniestro habría sido precedido por una explosión dentro del establecimiento, según testigos que se encontraban en la zona. Sin embargo, la Fiscalía descartó que se tratara de un acto provocado y apuntó a un posible accidente relacionado con una falla eléctrica.

“La hipótesis de trabajo es que el evento fue accidental y la línea de investigación versa respecto de un transformador que se encontraba en el interior del establecimiento comercial”, informó la institución en un comunicado.

La Comisión Federal de Electricidad (CFE) se deslindó de cualquier responsabilidad y aclaró que el transformador pertenecía al negocio, no a la red eléctrica nacional. “El transformador encontrado dentro de la tienda propiedad particular del establecimiento y no forma parte de la infraestructura eléctrica operada por la CFE”, precisó la empresa pública.

El Gobierno de Sonora, encabezado por Alfonso Durazo, ordenó el cierre temporal de las 68 tiendas Waldo’s del estado mientras avanzan las investigaciones. Además, solicitó a la empresa entregar documentación sobre sus empleados, permisos y regulaciones del local siniestrado.

Durante la tragedia, ocurrida en pleno Día de Muertos, el Ayuntamiento de Hermosillo suspendió todas las actividades festivas en señal de solidaridad con las víctimas.

El secretario de Salud estatal, José Luis Alomía, informó que 10 de los 15 heridos dados de alta, mientras que cinco permanecen hospitalizados. Tres presentan quemaduras leves y podrían darlos de alta en los próximos días.

Respecto a los dos pacientes más graves, Alomía indicó que el Gobierno ofreció a las familias trasladar a la joven de 20 años a una unidad médica especializada en Estados Unidos, cerca de la frontera sonorense.