- Gabriel Quadri solicita pensión para adultos mayores.
- Las críticas ganaron mayor fuerza al recordar una publicación del propio Quadri del pasado 21 de octubre.
- El incidente reabre el debate sobre los programas sociales en México.
El exdiputado federal Gabriel Quadri, de 70 años, ha vuelto a ser el centro de la polémica. Reconocido por sus críticas a los programas sociales implementados durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, Quadri acudió recientemente a gestionar la pensión universal para adultos mayores otorgada por la Secretaría del Bienestar. Su decisión generó una oleada de críticas en redes sociales, donde usuarios señalaron una aparente contradicción entre sus opiniones y acciones.
En la plataforma X (antes Twitter) circuló una fotografía que muestra al excandidato presidencial del extinto Partido Nueva Alianza sentado frente a una mesa, con una gorra verde olivo y una sudadera gris atada a la cintura. La imagen fue suficiente para desatar una lluvia de comentarios.
“Registrándose para recibir el apoyo del adulto mayor. El hijo pródigo de Elba Esther Gordillo”, escribió el usuario Rogelio Luna. Por su parte, otro internauta señaló: “La derecha llena de contradicciones tragándose sus propias palabras. Por un lado, votan en contra de los Programas Sociales del Bienestar, por el otro estiran la mano para recibirlos. Y sí, es tu derecho, @g_quadri; lo que se te critica es tu clasismo, tu hipocresía y tu estupidez”.
Las críticas ganaron mayor fuerza al recordar una publicación del propio Quadri del pasado 21 de octubre, donde calificó como “insostenibles” las pensiones no contributivas en México. Según él, factores como el envejecimiento de la población, la informalidad laboral, la baja recaudación fiscal y el aumento en la esperanza de vida amenazan con provocar un colapso financiero del sistema en el corto plazo.
Un debate que trasciende lo personal
Más allá de las críticas hacia Quadri, el incidente reabre el debate sobre los programas sociales en México y su sostenibilidad a largo plazo. La pensión universal para adultos mayores, uno de los programas insignia del gobierno de López Obrador, ha sido celebrada por sus beneficiarios, pero también cuestionada por quienes ven en ella una política costosa y de difícil mantenimiento en un país con baja recaudación fiscal.
Este caso ilustra cómo figuras públicas que han criticado tales programas pueden, al mismo tiempo, recurrir a ellos al alcanzar la edad de elegibilidad. La controversia en torno a Gabriel Quadri no solo refleja una contradicción personal, sino que también pone sobre la mesa las tensiones entre ideologías políticas y necesidades individuales en el México contemporáneo.
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