El gobierno estatal destinará 68 millones de pesos para reparar daños menores en escuelas.

A pesar de que las autoridades federales y estatales insisten en el regreso a clases en los municipios de Acapulco y Coyuca de Benítez tras el impacto del huracán Otis, el retorno total a las aulas no ha sido posible. De un total de mil 224 escuelas, sólo han regresado 257 y la mayoría sufrió algún daño.

El secretario general de la Asociación de Padres y Tutores por la Educación del Estado de Guerrero, Fernando Díaz Ángeles, afirmó que se puede dar por perdido el ciclo escolar.

El gobierno de Guerrero informó que destinará 68 millones de pesos para reparar daños menores en escuelas de esos municipios.

Son fondos del programa Apoyos Parciales Inmediatos para reparaciones menores provocadas por Otis.

Hasta el lunes 4 de diciembre se reportaban 811 centros educativos con diferentes tipos de daños, pero el censo aún continúa.

Un alto porcentaje de las escuelas de Acapulco y Coyuca de Benítez tenían techo de lámina en los salones y en los patios, ahora están totalmente a la intemperie.

Los recursos se utilizarán para retirar árboles caídos, remover escombros y limpieza de los planteles afectados.

La maestra Claudia señaló que “es imposible regresar a clases en esas condiciones, no hay agua potable en los baños y no hay un salón con techo. Además, la temperatura en Acapulco ha cambiado, nos quedamos sin árboles y no podemos exponer a los niños a un golpe de calor”, agregó.

Carlos, padre de familia, ve muy complicado todo “muchos de los padres de familia nos quedamos sin empleo, en la escuela de mi hija no hay luz, ni agua, ya la fuimos a limpiar con los maestros, pero la verdad no está habitable”, consideró.

Algunos maestros señalan que la mayoría de sus alumnos vivieron experiencias traumatizantes y necesitan ayuda psicológica y en eso deberían pensar las autoridades federales.