• Carreteras en México en mal estado: aumentan costos y riesgos.
• El estado de las carreteras también afecta la seguridad.
• La temporada de lluvias y huracanes es particularmente difícil.

El deterioro de las carreteras federales en México, especialmente las libres de peaje, está poniendo en grave riesgo al sector transportista, advirtieron expertos y miembros de la industria. La mala condición de estas vías no solo daña los vehículos que circulan por ellas, sino que también incrementa los costos operativos y expone a los transportistas a mayores riesgos de delincuencia.

Fidel Reyes, delegado de la Confederación Nacional de Transportistas Mexicanos (Conatram) en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (CDMX), destacó que el estado de las carreteras ha empeorado durante la presente administración, aunque el problema ha sido persistente a lo largo de los años.

“Si calificaramos estas carreteras en una escala del 1 al 100, no obtendrían ni 50 puntos”, afirmó Reyes en una reciente entrevista.

El deterioro de las vías se traduce en un aumento significativo en los costos de mantenimiento para las empresas de transporte. Los daños comunes incluyen neumáticos ponchados, birlos y rines rotos, así como daños en las suspensiones, que pueden provocar volcaduras. Rafael Ortiz Pacheco, presidente de la Asociación Mexicana de Transportistas AC (Amotac-Amotac), explicó que reemplazar una suspensión de un tractocamión puede costar entre 40 mil y 100 mil pesos, además del tiempo de espera para recibir las piezas necesarias.

El estado de las carreteras también afecta la seguridad. La necesidad de reducir la velocidad para evitar baches y la espera prolongada para reparaciones aumenta el riesgo de asaltos. Reyes señaló que la lentitud en la circulación provoca filas que la delincuencia aprovecha para llevar a cabo robos.

Entre las carreteras más afectadas se encuentran la Zacatecas-Saltillo y la Carretera Federal 16, en el tramo Mazocahui-Moctezuma, en Sonora. También, la Carretera 2, que va de Casas Grandes, Chihuahua, a Mexicali, presenta serios problemas. Los fenómenos naturales, como huracanes en Campeche y Veracruz, agravan el problema al causar deslaves y aumentar el daño a las vialidades.

La temporada de lluvias y huracanes es particularmente difícil para el transporte de carga terrestre debido a los deslaves y baches. Según los últimos datos de la Dirección General de la Conservación de las Carreteras, en 2022, el 25% de los caminos federales eran clasificados como malos, el 35% como regulares y solo el 38% como buenos.