• AMLO finaliza el sexenio con 27 reformas.
• López Obrador concluirá su administración en el tercer lugar entre los últimos seis presidentes en cuanto al número de reformas a la Constitución.
• López Obrador, al finalizar su mandato, habrá enviado 101 iniciativas al Poder Legislativo.

Andrés Manuel López Obrador cierra su mandato con la aprobación de 27 reformas constitucionales por parte del Congreso de la Unión, las cuales servirán como cimiento para el ‘segundo piso’ de la cuarta transformación. Durante su administración, el presidente logró implementar reformas emblemáticas que marcaron su gestión y el rumbo del país.

Entre las reformas más destacadas se encuentran la polémica modificación al Poder Judicial, la reforma educativa, y los decretos que establecieron la creación de la Guardia Nacional. Además, se logró elevar a rango constitucional las pensiones universales para adultos mayores y personas con discapacidad, así como las becas destinadas a estudiantes de instituciones educativas públicas.

AMLO, el tercer presidente con más reformas constitucionales

El conjunto de reformas del gobierno saliente incluye dos proyectos que ya cuentan con la aprobación de la Cámara de Diputados, y que el Senado de la República tiene previsto discutir y votar durante la última semana del mandato de López Obrador. Uno de estos proyectos se refiere al traspaso de la Guardia Nacional de la Secretaría de Seguridad a la Secretaría de la Defensa, mientras que el otro reconoce plenamente los derechos de los pueblos indígenas y afromexicanos.

Como parte del denominado ‘Plan C’, la 66 legislatura del Congreso heredó otros 14 dictámenes de su antecesora, listos para ser llevados al pleno. Entre estas propuestas destaca la extinción de siete organismos autónomos, entre ellos el INAI, la Cofece y el IFT, así como la preferencia de la CFE como empresa pública sobre los inversionistas privados en el sector eléctrico.

Podio

A pesar de estas reformas, López Obrador concluirá su administración en el tercer lugar entre los últimos seis presidentes en cuanto al número de reformas a la Constitución. Según los registros de la Secretaría de Servicios Parlamentarios de la Cámara de Diputados, Felipe Calderón lidera la lista con 38 reformas, seguido de Enrique Peña Nieto con 28 y, en tercer lugar, Andrés Manuel López Obrador con 27.

En términos de efectividad en la aprobación de sus iniciativas, el presidente se ubica por debajo de sus tres predecesores inmediatos. Peña Nieto presentó 124 iniciativas, de las cuales se aprobaron 99, lo que representa un 79.84 por ciento. Calderón, por su parte, planteó 132 propuestas, con 105 aprobaciones, equivalente al 79.55 por ciento. Vicente Fox, quien presentó la mayor cantidad de iniciativas (166), logró 124 aprobaciones, un 74.70 por ciento.

López Obrador, al finalizar su mandato, envió 101 iniciativas al Poder Legislativo, de las cuales se estima que 67 se aprueben (66.33 por ciento), considerando las reformas judiciales, el traspaso de la Guardia Nacional al Ejército, y la reforma sobre derechos indígenas.

Reformas emblemáticas de AMLO

Durante su administración, el presidente López Obrador impulsó reformas constitucionales significativas para el movimiento de la cuarta transformación. Entre ellas destaca la creación de la Guardia Nacional como una institución policial de carácter civil adscrita a la Secretaría de Seguridad, aunque integrada por elementos del Ejército y la Marina.

Además, cumplió su promesa de campaña al derogar la reforma educativa de Peña Nieto y el sistema de evaluación docente, proponiendo nuevos cambios a los artículos 3, 31 y 73 de la Constitución, que llevaron a la creación del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros y el Sistema Nacional de Mejora Continua de la Educación.

El Ejecutivo también logró la reforma del artículo 4 de la Constitución para garantizar servicios de salud gratuitos a quienes no tienen seguridad social, así como apoyos económicos para personas adultas mayores y con discapacidad, y becas para estudiantes de todos los niveles educativos.

Estableció la figura de revocación de mandato para el presidente y se limitó el fuero constitucional, permitiendo que al mandatario lo juzguen por traición a la patria, corrupción, delitos electorales y otros por los cuales puede ser enjuiciado un ciudadano común. Asimismo, se incorporó a la Constitución la prohibición de partidas secretas en el Presupuesto de Egresos y la condonación de impuestos a particulares.

Finalmente, una de las reformas prioritarias fue la ampliación del catálogo de delitos sujetos a prisión preventiva oficiosa, incluyendo el abuso o violencia sexual contra menores, feminicidio, robo en casa habitación, uso electoral de programas sociales, corrupción, ‘huachicoleo’, desaparición forzada y delitos relacionados con armas de fuego y explosivos.