- Condenan a feminicida de Tlahualilo.
- Recibe pena de más de 36 años en prisión.
- Autoridades dan los pormenores.
Tlahualilo.- La Vicefiscalía General del Estado de Durango ha informado sobre la obtención de una sentencia de más de 36 años de prisión para Rodrigo Mansilla Villafuerte, de 42 años, quien fue encontrado culpable de feminicidio. El crimen tuvo lugar en el municipio de Tlahualilo y la víctima fue Perla Nayeli Salazar Rivera, de 31 años.
El Agente del Ministerio Público presentó ante un Juez de Control y Enjuiciamiento pruebas y argumentos suficientes que llevaron a la condena de Mansilla. Según la necropsia, la causa de muerte de Perla Nayeli fue anoxemia por estrangulamiento.
Los hechos ocurrieron la tarde del domingo 7 de enero del presente año. Rodrigo Mansilla contactó a Perla Nayeli a través de la red social Facebook. Ambos acordaron encontrarse en una tapia abandonada conocida como «La Funda», ubicada en la calle Martín López de la Zona Centro de Tlahualilo. En ese lugar, Mansilla agredió físicamente a Perla Nayeli y la estranguló, causándole la muerte. Tras el asesinato, el agresor se apoderó de un teléfono celular marca Samsung que pertenecía a la víctima.
Condenan a feminicida de Tlahualilo
El cuerpo de Perla Nayeli fue localizado poco tiempo después del crimen. Elementos de la Policía Investigadora de Delitos (PID) acudieron al lugar y detuvieron a Rodrigo Mansilla dentro del término de flagrancia. Posteriormente, se ejerció acción penal en su contra y fue trasladado al Centro de Reinserción Social (CERESO) número 1 de la ciudad de Durango.
Rodrigo Mansilla admitió su responsabilidad en los delitos de feminicidio y robo, y se sometió a un procedimiento abreviado que concluyó con la sentencia emitida por el juez. Mansilla recibió una pena privativa de la libertad de 36 años y 3 meses de prisión. Además, deberá pagar una multa de 281,031 pesos y una reparación del daño por la cantidad de 1,259,585 pesos.
Este caso resalta la gravedad de los feminicidios en México, un problema que ha generado una creciente preocupación y movilización social. La sentencia de Mansilla Villafuerte es un reflejo del compromiso de las autoridades de Durango para abordar estos crímenes con la seriedad que merecen. Las cifras de feminicidios en el país han llevado a un clamor por justicia y protección para las mujeres.








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