• Unión Europea impone aranceles a automóviles eléctricos chinos.
• Bruselas ha propuesto medidas temporales, informando a autoridades chinas, estados miembros y sectores implicados.
• La decisión final sobre la permanencia de los aranceles se tomará en noviembre.

A partir del jueves 4 de julio, la Unión Europea comenzará a aplicar aranceles provisionales que podrían alcanzar hasta un 38% a los automóviles de batería eléctrica importados desde China.

Esta medida surge tras meses de negociaciones infructuosas entre Bruselas y Pekín, debido a las subvenciones que reciben los fabricantes chinos, vistas por Europa como una competencia desleal.

Los aranceles, que entrarán en vigor el 5 de julio tras su publicación en el Diario Oficial de la UE, se sumarán al 10% ya existente sobre las importaciones de vehículos eléctricos chinos.

La Unión Europea argumenta que estas medidas son necesarias para contrarrestar el «dumping» económico que perjudica a los fabricantes europeos.

La investigación de la Comisión Europea, iniciada en octubre del año pasado por supuestas subvenciones anticompetitivas, establece un plazo de 13 meses para tomar una decisión formal.

Anticipándose a este plazo, Bruselas ha propuesto medidas temporales, informando a autoridades chinas, estados miembros y sectores implicados.

Las reacciones dentro de la UE son mixtas: países como Alemania y Suecia expresan preocupación por una potencial escalada en una guerra comercial con China, mientras que España y Francia respaldan la medida como necesaria para proteger la equidad comercial.

Automóviles eléctricos chinos

La decisión final sobre la permanencia de los aranceles se tomará en noviembre, sujeta a la aprobación de los veintisiete estados miembros.

Desde el anuncio inicial de los aranceles provisionales, se han llevado a cabo consultas técnicas con las partes involucradas para buscar una solución efectiva, aunque hasta el momento no se han alcanzado acuerdos satisfactorios.

Pekín, por su parte, ha respondido con investigaciones de represalia, siguiendo las normativas de la Organización Mundial del Comercio (OMC).

La Comisión Europea ha ajustado las tasas propuestas inicialmente tras consultas con las empresas afectadas, reduciendo ligeramente los porcentajes de los aranceles.

Por ejemplo, los aranceles a fabricantes como BYD, Geely y SAIC han sido revisados, con ajustes que reflejan la cooperación o falta de ella durante la investigación.

Los servicios comunitarios intensifican la vigilancia de las importaciones tras observar un aumento significativo en la entrada de vehículos chinos. Las cifras indican un incremento del 11% en comparación con el año anterior.

Este monitoreo continuará mientras se evalúa la efectividad de las medidas propuestas para mantener la estabilidad en el mercado europeo de automóviles eléctricos.

Unión Europea impone aranceles a automóviles eléctricos chinos: ¿protección o guerra comercial?