• México sube aranceles a autos asiáticos y China responde.
• Sheinbaum asegura que no busca conflicto, sino proteger 320 mil empleos nacionales.
• China rechaza la medida y advierte que afectará la confianza de sus empresas en México.

El aumento de aranceles a los coches asiáticos anunciado este miércoles por el Gobierno de Claudia Sheinbaum desató una inmediata respuesta desde Pekín. El portavoz del ministerio de Exteriores, Lin Jian, expresó que China “se opone firmemente a todas las formas de unilateralismo y proteccionismo” y advirtió que “protegerá decididamente” los derechos e intereses de su país.

La medida mexicana contempla incrementos de hasta el 50% a los autos importados desde China —actualmente sujetos a un 20%— y se extendería a otros sectores como la industria textil y la siderúrgica. También impactaría a países sin acuerdo comercial con México como Corea del Sur, India, Indonesia, Rusia y Tailandia.

Aunque en China se interpreta como una concesión a la presión de Estados Unidos en plena guerra arancelaria global, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, negó esa lectura. “No es un pretexto geopolítico, es el sistema comercial”, afirmó en entrevista radial, subrayando que el objetivo es proteger los cerca de 320.000 empleos nacionales en riesgo por la entrada de productos a precios inferiores al de referencia.

El anuncio ocurre en un contexto en que México se ha convertido en el principal destino de los autos chinos, con 280.100 vehículos exportados en el primer semestre de 2025, un crecimiento interanual del 24%, según Bloomberg.

Para China, el golpe llega en un momento delicado: sus exportaciones son clave para sostener su economía, en tanto que la ralentización del comercio global ya afecta su desempeño. Desde Pekín, el ministerio de Comercio advirtió que la medida mexicana podría reducir la confianza de las empresas chinas para invertir en el país.

SHEINBAUM PIDE NO ESCALAR EL CONFLICTO

Por su parte, Sheinbaum pidió no escalar el tema a un conflicto diplomático: “Estamos hablando con el embajador de China y de Corea del Sur para explicar que esta medida tiene que ver con fortalecer nuestra economía. No queremos conflictos con nadie”, declaró en su conferencia mañanera. También descartó un impacto inflacionario.

El plan forma parte del denominado “Plan México”, con el que el Ejecutivo busca blindar la industria nacional y reducir ventajas fiscales a productos extranjeros, sumándose a recientes restricciones al calzado importado. El impacto económico estimado de las nuevas tarifas rondaría los 52.000 millones de dólares, equivalente al 8,6% de las importaciones nacionales.