El Gran Premio de Países Bajos estuvo repleto de emociones, y el piloto mexicano Sergio Pérez no estuvo exento a ellas. Del primer lugar al séptimo, el tapatío vivió euforia y frustración en un mismo día.

En una carrera que tuvo a la lluvia como gran protagonista, «Checo» explotó con su equipo de mecánicos por una pésima parada en pits que duró 10 segundos y le costó varias posiciones al mexicano.

«¿Por qué paramos? Somos unos estúpidos», expresó Pérez con su equipo.

La tormenta era inevitable en el Circuito de Zandvoort, y «Checo» fue a pits para cambiar sus neumáticos, motivo que desató la furia del mexicano por la demora en tal cambio y por pasar de ser tercero a sexto.

Finalmente, una penalización le quitó cinco segundos a «Checo» y eso determinó que quedara fuera del podio y tome el cuarto lugar de la parrilla final.