• Prevén ´reingeniería´ en la Fiscalía de Coahuila.
• Hay un proceso de evaluación interna, con el objetivo de optimizar su estructura y funcionamiento.
• Al frente está el nuevo fiscal, Federico Fernández Montañez, ex secretario de Seguridad Pública del Estado.

La Fiscalía General de Coahuila se encuentra en medio de un proceso de evaluación interna, con el objetivo de optimizar su estructura y funcionamiento. El Fiscal General del Estado, Federico Fernández Montañez, ha comenzado a implementar un diagnóstico exhaustivo que, según sus declaraciones, servirá como base para una serie de cambios y ajustes dentro de la institución.

Desde el inicio de su gestión, Fernández Montañez ha mantenido reuniones con diversos mandos y personal de la FGE, con el propósito de identificar áreas de oportunidad y conocer las condiciones actuales de la dependencia. “Estamos en la etapa de levantamiento del diagnóstico. Ya hemos comenzado a proyectar algunos cambios. He tenido la oportunidad de dialogar con muchos de los mandos superiores de la Fiscalía, y en esta fase estamos realizando los primeros ajustes necesarios para avanzar”, comentó el Fiscal. Este proceso de diagnóstico busca asegurar que cualquier modificación o reestructuración se base en una comprensión clara de las necesidades reales de la institución.

El análisis no se limita únicamente a la sede central, sino que también incluirá visitas a las delegaciones regionales de la Fiscalía. El objetivo es hacer un recorrido para conocer las particularidades de cada oficina y cómo estas pueden ser mejoradas en términos de operatividad y eficiencia.

Posibles nombramientos y ajustes

Aunque aún no se han definido los detalles específicos sobre los cambios que se implementarán, el Fiscal dejó claro que el proceso de reestructuración implicará nombramientos y ajustes necesarios para mejorar la operatividad de la institución. “A pesar de que todavía no puedo confirmar con precisión todos los cambios que se realizarán, lo cierto es que estamos comprometidos con mejorar la operatividad de la Fiscalía para garantizar una atención más eficaz a la ciudadanía”, concluyó Fernández Montañez.

Compromiso con la eficiencia y la atención ciudadana

La transparencia y el compromiso con la mejora continua parecen ser los pilares de este proceso. A pesar de que los cambios aún no son definitivos, el Fiscal se ha mostrado firme en su propósito de optimizar la capacidad operativa de la Fiscalía para brindar una mejor atención a la ciudadanía, asegurando que las reformas se adaptarán a las realidades de cada región.

Los próximos meses serán clave para la Fiscalía General de Coahuila, ya que la implementación de estos cambios podría marcar una nueva etapa en la eficiencia de la institución. La reestructuración y los ajustes que se realicen, dependerán de los diagnósticos que se obtengan durante este proceso. Si bien aún hay incertidumbre sobre los detalles, la apuesta por una Fiscalía más eficaz y cercana a las necesidades de la población es una prioridad clara para la nueva gestión.