• Coahuila y Durango tendrán obras hídricas con Sheinbaum.
• Garantizarían el abastecimiento de agua potable a largo plazo.
• Lo importante es ver que por ningún motivo se detengan los proyectos.

El Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2025 destina recursos significativos a proyectos hidráulicos en Durango y Coahuila, destacando la continuidad de Agua Saludable para La Laguna y otras iniciativas clave en ambas entidades. Aunque algunos proyectos reciben menos asignaciones que en años previos, el plan busca atender las necesidades hídricas y garantizar el abastecimiento de agua potable a largo plazo.

En Durango, se incluyen obras como la construcción de la Presa Tunal II, considerada esencial para garantizar agua potable durante los próximos 50 años, beneficiando a familias y al desarrollo industrial. Este proyecto, inscrito en el Plan Nacional Hídrico 2025, continúa siendo una prioridad. También se planea construir una Planta Potabilizadora que aprovechará el agua de la presa Guadalupe Victoria, con una inversión de 1,438 millones de pesos, de los cuales 239 millones serán ejercidos en 2025.

Además, se destinarán recursos a estudios hidrogeológicos en el acuífero Villa Juárez, que permitirán optimizar su manejo integral, y a unidades de riego en San Juan del Río, que buscan mejorar la disponibilidad de agua para actividades agrícolas.

En Coahuila, destaca la rehabilitación de la Presa La Amistad, con una inversión de 863 millones de pesos para 2025, y el sistema de drenaje pluvial en Torreón, con 491 millones asignados. Ambas obras buscan prevenir inundaciones y garantizar el uso eficiente del agua.

Y la Comarca…

El proyecto de Agua Saludable para La Laguna, con un costo total de 17,774 millones de pesos, recibirá 3,362 millones en 2025, consolidando su impacto en ambas entidades. Asimismo, el Programa Nacional de Tecnificación beneficiará a más de 225 mil productores agrícolas, optimizando el uso del agua y recargando mantos acuíferos.

La apuesta del gobierno federal en infraestructura hídrica refleja la urgencia de atender la creciente demanda de agua en Durango y Coahuila. Aunque persisten desafíos en la asignación de recursos, los proyectos previstos prometen beneficios a largo plazo, tanto para el consumo humano como para la sostenibilidad agrícola e industrial de la región.