• Antropólogos se suman a la búsqueda de Pablo Jared en Coahuila.
• La incertidumbre sigue siendo un peso abrumador para los seres queridos del joven.
• Pablo Jared desapareció en la región desértica de Coahuila, conocida como la Zona del Silencio.

Después de tres meses y 21 días de la desaparición de Pablo Jared, su familia sigue buscando respuestas. La incertidumbre sigue siendo un peso abrumador para los seres queridos del joven, quienes han intensificado sus esfuerzos para encontrarlo. Ahora, se ha incorporado un equipo de antropólogos especializados, quienes aportarán su experiencia en la búsqueda, con la esperanza de hallar alguna pista que ayude a dar con su paradero.

Pablo Jared desapareció en la región desértica de Coahuila, conocida como la Zona del Silencio, un área remota y difícil de explorar. Con el paso del tiempo, la angustia de su familia crece, mientras se enfrentan al dolor de la incertidumbre. La búsqueda ahora abarca amplias hectáreas, comenzando en los alrededores de donde fue encontrada su camioneta. El objetivo es identificar cualquier vestigio que pueda confirmar si Pablo estuvo en esa área en el momento de su desaparición.

“Tratamos de dar más o menos el ángulo de la foto que toman en la avioneta y donde se veían las cosas, el que seguimos justo da al camino que vamos a interceptar”, expresó Diana Guerrero, arqueóloga de identificación humana en Coahuila.

El equipo de búsqueda, que incluye agentes de la Comisión Estatal de Búsqueda de Coahuila y Durango, así como miembros del Centro Regional de Identificación Humana de Coahuila, utiliza vehículos todoterreno y drones para cubrir el vasto territorio. Hasta el momento, se han tomado más de 10 mil fotografías de la zona en busca de alguna pista reveladora.

Hipótesis

Entre las posibles teorías sobre la desaparición de Pablo Jared, una sugiere que al quedarse sin señal, pudo haber intentado llegar a una antena lejana. Aunque en el sitio se encontraron un chip de celular y partes de un dispositivo eléctrico, no se ha logrado esclarecer la situación. Por su parte, la familia ha sido persistente en su búsqueda, enfrentando tanto el calor abrasante como el frío extremo del desierto.

“Hemos aguantado muchísimas cosas, recursos, dinero, es una agonía día a día no saber en dónde está mi hijo. Queremos ir a otros municipios a buscar a nuestro hijo. No sabemos las condiciones en las que esté porque tenemos la esperanza de encontrarlo vivo”, expresó Janeth Adame, madre de Pablo Jared.

A pesar de la falta de pistas claras, los familiares de Pablo continúan con la búsqueda, sin importar las adversidades. Se especula sobre posibles implicaciones de autoridades locales en su desaparición, pero las investigaciones continúan. La familia pide que cualquier persona que pueda tener información se comunique de forma anónima.

“Siempre hay alguien que ve… siempre hay alguien que escucha, yo pido a todas las personas y se los ruego de corazón que nos ayuden, si alguien sabe algo, que nos lo hagan saber de manera anónima”, finalizó Janeth Adame.