- Reloj del Juicio Final: ¿Por qué marca 90 segundos?
- La medición más reciente del Reloj del Juicio Final marca el momento más cercano al «fin del mundo» desde su creación.
- En 2020, la pandemia de COVID-19 causó un ajuste aún más alarmante a 100 segundos para la medianoche.
Desde su creación en 1947, el Reloj del Juicio Final ha servido como un termómetro simbólico para medir la proximidad de la humanidad a una catástrofe global.
Diseñado por el Boletín de Científicos Atómicos, este reloj refleja las amenazas que ponen en peligro la estabilidad del planeta, y en su última actualización de 2024, se encuentra en el nivel más crítico de su historia: 90 segundos antes de la medianoche.
Un hito alarmante: 90 segundos antes del fin
La medición más reciente del Reloj del Juicio Final marca el momento más cercano al «fin del mundo» desde su creación. Según Rachel Bronson, presidenta del Boletín de Científicos Atómicos, este nivel refleja una serie de crisis globales que han escalado, poniendo al mundo en una situación de vulnerabilidad extrema.
Factores que han desencadenado la alarma global
El avance del reloj a 90 segundos no es una simple representación simbólica, sino un reflejo de las amenazas reales que enfrenta el planeta. Entre los factores que han intensificado esta crisis se encuentran:
- La guerra en Ucrania y Rusia: Un conflicto que no solo ha generado una crisis humanitaria, sino que ha elevado el riesgo de un enfrentamiento nuclear.
- La Inteligencia Artificial (IA): Aunque es una herramienta con enormes potenciales, su desarrollo descontrolado plantea riesgos económicos, sociales y de seguridad a nivel mundial.
- El cambio climático: Las alteraciones extremas en los ecosistemas, el aumento de fenómenos meteorológicos extremos y la pérdida de biodiversidad continúan siendo una amenaza tangible para el planeta.
- La pandemia de COVID-19: Aunque comenzó en 2020, la pandemia dejó una marca duradera en sistemas de salud y economías globales, evidenciando la fragilidad de la humanidad frente a crisis sanitarias.
- El armamento nuclear: La proliferación y modernización de arsenales nucleares continúan siendo una amenaza existencial en un mundo marcado por tensiones geopolíticas.
Bronson ha señalado que el avance del reloj es una llamada de atención global. «No es una indicación de que el mundo esté estable», comentó, instando a una acción urgente para mitigar los riesgos.
El llamado a la acción: Cooperación global
Frente a estos desafíos, el Boletín de Científicos Atómicos insta a los gobiernos, organizaciones y ciudadanos a actuar de manera conjunta. Entre las posibles soluciones destacan:
- Reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.
- Regulación ética de la Inteligencia Artificial.
- Fortalecimiento de tratados de desarme nuclear.
- Inversión en resiliencia sanitaria global.
La historia del Reloj del Juicio Final
El Reloj del Juicio Final ha sido ajustado 25 veces desde su creación, reflejando los altibajos de la situación global. En sus primeros años, en 1947, marcaba 7 minutos antes de la medianoche, pero con el paso del tiempo, ha alcanzado momentos críticos, como en 1953 durante la Guerra Fría, cuando las manecillas avanzaron hasta las 11:58. La situación empeoró en 2018, cuando las tensiones nucleares y la inacción frente al cambio climático llevaron el reloj a 2 minutos antes de la medianoche.
En 2020, la pandemia de COVID-19 causó un ajuste aún más alarmante a 100 segundos para la medianoche, el nivel más cercano al apocalipsis en la historia del reloj. Sin embargo, 2023 y 2024 marcaron un aumento aún mayor a los 90 segundos.
Aunque el reloj ha sido criticado por algunos sectores como un instrumento alarmista, los científicos insisten en que su propósito es generar reflexión, no pánico. Es un recordatorio constante de los peligros que acechan a la humanidad.
0 comentarios