- A 89 segundos del apocalipsis: Reloj del juicio final lanza alerta.
- Cada segundo aumenta la probabilidad de una catástrofe global.
- El Reloj del Juicio Final creado en 1947 tras el impacto de las primeras bombas atómicas.
El «Reloj del Juicio Final», una metáfora creada hace 78 años por el Boletín de Científicos Atómicos, marca ahora 89 segundos para la medianoche, la distancia más cercana al apocalipsis en toda su historia.
Esta decisión, anunciada en una conferencia desde Washington, D.C., refleja las crecientes amenazas globales que enfrenta la humanidad, incluyendo armas nucleares, crisis climática, guerras y riesgos tecnológicos.
Una advertencia urgente
Durante la conferencia, Daniel Holz, presidente de la Junta de Ciencia y Seguridad del Boletín, señaló: “El mundo no ha hecho suficiente para detener nuestro propio final. Cada segundo aumenta la probabilidad de una catástrofe global”. Este simbólico reloj, que se mueve basándose en parámetros científicos y geopolíticos, busca alertar a líderes mundiales y a la población sobre la necesidad de acciones inmediatas.
El expresidente colombiano y Premio Nobel de la Paz, Juan Manuel Santos, participó en el evento, subrayando la urgencia de la cooperación internacional. “Esto aún no es irreversible; todavía tenemos una oportunidad de mover las manecillas del reloj a nuestro favor. Cada segundo cuenta”, afirmó, mientras criticaba el aumento en la producción de combustibles fósiles impulsado por algunos gobiernos, incluido el de Donald Trump.
Historia de un cronómetro simbólico
El Reloj del Juicio Final fue creado en 1947 tras el impacto de las primeras bombas atómicas y ha sido actualizado 26 veces desde entonces. En sus primeros años, marcaba siete minutos para la medianoche. En 1991, con el fin de la Guerra Fría, se estableció el registro más optimista: 17 minutos. Sin embargo, el panorama ha empeorado desde entonces, especialmente con la incorporación del cambio climático como una amenaza clave desde 2007.
Aunque los críticos han señalado que este ejercicio podría promover el alarmismo, sus defensores aseguran que el objetivo es despertar conciencia sobre los peligros que enfrenta la humanidad y motivar a los líderes a tomar decisiones transformadoras.
Hoy, con el reloj marcando su peor registro, la pregunta sigue siendo: ¿Podrá la humanidad dar marcha atrás a estas manecillas o se acercará cada vez más al abismo?







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