• Dodgers conquistan su octava Serie Mundial.
• El juego fue un sube y baja de emociones, ya que los Yankees parecían tener la victoria asegurada.
• La victoria de los Dodgers especialmente emotiva para Freeman.

Los Dodgers de Los Ángeles se coronaron campeones de la Serie Mundial por octava vez, derrotando a los Yankees de Nueva York en un épico partido que cerró 7-6 en el marcador.

La noche estuvo llena de drama, con un desempeño que quedará en la memoria de los aficionados, no solo por la victoria, sino por el homenaje implícito en el año de la muerte de Fernando Valenzuela, leyenda del equipo. Este ansiado título marca la primera celebración que tendrá un desfile por las calles de Los Ángeles desde 2020, cuando la pandemia impidió la celebración en casa.

El juego fue un sube y baja de emociones, ya que los Yankees parecían tener la victoria asegurada al mantener una ventaja inicial de 5-0, gracias a los jonrones de Aaron Judge, Jazz Chisholm Jr. y Giancarlo Stanton. Sin embargo, la quinta entrada fue catastrófica para Nueva York, con errores defensivos que permitieron a los Dodgers cambiar el rumbo del juego. Un fallo de Judge al atrapar un batazo y un mal lanzamiento de Gerrit Cole, quien se vio forzado a lanzar 108 pelotas en poco más de seis entradas, permitieron a Los Ángeles igualar el marcador y tomar la delantera en una entrada que les otorgó cinco carreras.

FREDDIE FREEMAN, MVP

El protagonista indiscutible de la noche fue Freddie Freeman, nombrado MVP de la Serie Mundial por sus cuatro jonrones consecutivos en partidos clave. Freeman mantuvo la ofensiva de los Dodgers en el momento más crucial, bateando con un promedio de .300 y registrando un impresionante grand slam en la décima entrada del juego inicial. Al final, sus 12 carreras impulsadas en cinco juegos lo colocan junto a Bobby Richardson, una leyenda de los Yankees.

La victoria de los Dodgers especialmente emotiva para Freeman, quien tuvo que lidiar con la enfermedad de su hijo Maximus durante la temporada, diagnosticado con el síndrome de Guillain-Barré. Después de pasar varios días en el hospital y recuperarse, Maximus pudo ver a su padre regresar al campo para culminar una temporada que cierra de la manera más satisfactoria para el jugador y su equipo.