• Foxconn construirá en México planta de superchips de Nvidia.
• Foxconn, cuyo nombre oficial es Hon Hai Precision Industry, ya cuenta con una sólida presencia manufacturera en México.
• Los superchips GB200 son esenciales para la plataforma informática de próxima generación de la familia Blackwell AI.

El gigante tecnológico taiwanés Foxconn ha anunciado la construcción de la fábrica más grande del mundo en México para ensamblar los superchips GB200, utilizados en servidores de inteligencia artificial (IA) de última generación de Nvidia. Esta planta estará ubicada en Guadalajara, marcando un importante hito en la desvinculación de las cadenas de suministro de tecnología global de China, según reporta el Financial Times.

Foxconn, cuyo nombre oficial es Hon Hai Precision Industry, ya cuenta con una sólida presencia manufacturera en México, habiendo invertido más de 500 millones de dólares en el estado de Chihuahua. Este nuevo proyecto refuerza su posición como uno de los principales ensambladores de componentes electrónicos, conocido mundialmente por su papel clave en la fabricación del iPhone de Apple.

La importancia de los superchips GB200

Los superchips GB200 son esenciales para la plataforma informática de próxima generación de la familia Blackwell AI de Nvidia, la cual está en alta demanda para procesar trabajos de inteligencia artificial. Benjamin Ting, vicepresidente senior de Foxconn para el negocio de Soluciones Empresariales en la Nube, destacó que la demanda de estos superchips es «enorme» y que la asociación con Nvidia es clave para atender las necesidades de esta tecnología.

Durante el evento anual de tecnología de Foxconn en Taipéi, Ting comentó que “todo el mundo” está solicitando la plataforma Blackwell de Nvidia, y que la construcción de la planta en México es una respuesta directa a este auge. Por su parte, el presidente de Foxconn, Young Liu, mencionó que la capacidad de producción de la planta será “muy enorme”, aunque no ofreció más detalles sobre el proyecto.

Una clara apuesta por la IA

Este anuncio refuerza la creciente relevancia de México en la industria tecnológica global, al mismo tiempo que ilustra el auge de la inteligencia artificial y su impacto en la fabricación de componentes clave. Con esta planta, Foxconn busca capitalizar el crecimiento exponencial de la IA, al tiempo que diversifica su cadena de producción fuera de China.