• Policía de Durango rescata a 165 turistas violentados.
• En la Carretera Durango – Mazatlán un grupo armado los obligó a descender de sus camiones.
• La corporación de seguridad realizó maniobras para que llegaran sanos y salvos a sus destinos.

La Policía Estatal llevó a cabo un exitoso rescate de 165 turistas que los forzaron a descender de sus autobuses en la carretera de cuota Durango-Mazatlán. A los viajeros, algunos en ruta hacia Mazatlán y otros regresando a Durango, los interceptaron varias camionetas con individuos armados, quienes los obligaron a abandonar dos de las unidades. Para obstruir el paso de las autoridades, los atacantes incendiaron los vehículos en medio de la carretera.

Los hechos ocurrieron el pasado jueves por la tarde, cuando los agentes de la Policía Estatal realizaban recorridos de prevención y vigilancia en la carretera. A través de un reporte al número de emergencias 9-1-1 en el C5, se alertó sobre la situación en la comunidad de Chavarría Nuevo, perteneciente al municipio de Pueblo Nuevo, específicamente en el kilómetro 133. Al llegar al lugar, los oficiales encontraron tres autobuses y a todos los pasajeros en buen estado, sin lesiones, resguardados tras ser despojados de dos de los autobuses, los cuales incendiaron.

Los oficiales dialogaron con el conductor de un autobús de la línea Premium, de color rojo, que había salido de Torreón, Coahuila, con 50 pasajeros con destino a Mazatlán. También hablaron con el chofer de un autobús Irizar, de color azul, procedente de Monclova, Coahuila, que transportaba 35 pasajeros. El tercer autobús, de la empresa Futura, color blanco, provenía de Mazatlán y llevaba a 80 pasajeros hacia Durango.

Testimonio

Uno de los conductores relató que, al dirigirse a Durango, los interceptaron camionetas con personas armadas que les obligaron a abandonar sus autobuses, usándolos como barricadas. Los pasajeros se refugiaron en la escuela primaria de Chavarría Nuevo. Agentes estatales llegaron al lugar para brindar asistencia.

A los pasajeros con destino a Mazatlán los ayudaron a trasladarse a la caseta de Llano Grande, donde los esperaban dos unidades de la misma empresa para dividir a los pasajeros, quienes viajaban con exceso de personas. De igual manera, los que regresaban de Mazatlán a Durango recibieron apoyo para llegar sanos y salvos a la capital del estado.