¿Qué sigue? Luego de la controversial aprobación de la Reforma Judicial federal, Gerardo Aguado reflexiona sobre el proceso en Coahuila, llamando a una reforma sin ideologías políticas, enfocada en el bienestar de los ciudadanos y el acceso a la justicia.

Luego de la aprobación de la Reforma Judicial en el Congreso de la Unión, Cámara de Diputados y de Senadores, la minuta de la aprobada reforma judicial pasó para su último tramo del proceso parlamentario a los Congresos Locales. Se necesitan el 50 + 1 de estos, es decir, 17, meta nada complicada para Morena, que en tiempo récord juntó 24 Congresos estatales, de las entidades federativas que gobierna y donde tiene mayoría calificada en las legislaturas locales.

No obstante, no podemos dejar de lado que la operación durante el proceso de la reforma, por parte del partido oficial, o sea, Morena, desde un principio tan burda y descarada que los foros para la reforma fueron política ficción. Ninguna propuesta de la oposición, de la Suprema Corte, de los magistrados y jueces, de los colegios de abogados y de las asociaciones de funcionarios judiciales tomada en cuenta. Y bueno, ni qué decir del nulo diálogo con las distintas fuerzas parlamentarias para llegar a consensos al interior de las cámaras.

Y pues bueno. Al final, la reforma ya se aprobó, y se aprobó a través de chicanadas, extorsión política y compra de voluntades.

Sin embargo, cuando a nosotros, en Coahuila, nos toque armonizar la Constitución local, lo cual es inevitable, y demás leyes secundarias estatales, tenemos la oportunidad de no cometer el mismo error que cometieron desde que se gestó el proyecto de reforma judicial federal. Nosotros tenemos el compromiso de no politizar ni contaminar ideológicamente al Poder Judicial Estatal.

REFORMA INTEGRAL

Nosotros, llegado el momento, propondríamos una reforma integral, que beneficie a los ciudadanos en materia de acceso a la justicia y que respete, por supuesto, el derecho de los trabajadores.

Aquí en Coahuila tenemos claro que tanto nosotros como poder legislativo, como el poder ejecutivo estatal, hemos emprendido una cruzada por la ciudadanización del gobierno y las instituciones que nos rigen.

Para nosotros, en Coahuila, su gente es lo más importante. Por eso vamos a buscar una reforma judicial estatal que haga a un lado ideologías políticas. Invitamos a los compañeros de Morena a centrarnos en el contexto local, porque hoy queda claro que lo federal nos divide, porque en lo federal se impone, se intimida, pero en lo local debemos estar de acuerdo en que en Coahuila la gente manda.