- Cómo manejar sobras de comida: consejos para evitar desperdicio.
- Las sobras congeladas pueden mantenerse en buen estado por un período más prolongado.
- Las mejores prácticas para descongelar incluyen usar el microondas.
La decisión sobre qué hacer con las sobras de comida puede ser complicada: ¿guardarlas en el refrigerador para más tarde o desecharlas? Tirar la comida no siempre es la mejor opción, ya que las sobras pueden ser una solución rápida y deliciosa. Sin embargo, es crucial saber cuánto tiempo podemos conservarlas sin poner en riesgo nuestra salud.
Katherine Zeratsky, experta en nutrición de la Mayo Clinic en Rochester, ofrece orientación esencial para manejar las sobras de manera segura. Según Zeratsky, las sobras deben ser almacenadas en el refrigerador durante un máximo de 3 a 4 días. Pasado este período, el riesgo de intoxicación alimentaria aumenta significativamente. Si no planeas usar las sobras dentro de este tiempo, es mejor congelarlas de inmediato.
Las sobras congeladas pueden mantenerse en buen estado por un período más prolongado, pero su sabor y calidad son óptimos durante los primeros 3 a 4 meses. Aunque aún pueden ser consumidas después de este tiempo, su calidad puede deteriorarse.
¿Qué sucede después de 3 o 4 días en el refrigerador?
Zeratsky explica que, tras este tiempo, las sobras pueden desarrollar bacterias que no alteran el sabor, el olor ni el aspecto de los alimentos, lo que aumenta el riesgo de intoxicación alimentaria. Si tienes dudas sobre la seguridad de un alimento, lo más seguro es descartarlo.
Además, es importante descongelar las sobras adecuadamente. Evita dejarlas a temperatura ambiente, ya que esto puede propiciar el crecimiento de bacterias. Las mejores prácticas para descongelar incluyen usar el microondas, dejar las sobras en el refrigerador durante la noche o sumergirlas en agua fría en un recipiente hermético.
Consejos de almacenamiento y recalentamiento:
- Refrigeración: Coloca las sobras en el refrigerador inmediatamente después de comer. Los alimentos no deben estar a temperatura ambiente por más de dos horas; si la temperatura es igual o superior a 32°C (90°F), no deben estar fuera del refrigerador por más de una hora.
- Temperatura de conservación: Mantén las comidas calientes a unos 60°C (140°F) en una bandeja caliente o olla eléctrica, y las comidas frías en tazones con hielo.
- Recalentamiento: Asegúrate de calentar las sobras hasta que la temperatura interna alcance los 74°C (165°F). Revuelve bien para que la comida se caliente uniformemente y evita usar ollas eléctricas para recalentar, ya que el calor lento puede favorecer el crecimiento de bacterias.
Estos simples pasos te ayudarán a reducir el desperdicio de alimentos y a garantizar que tus sobras sean seguras para el consumo.







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