En el ojo del huracán se encuentra la financiera Inverforx, ubicada en el local número 8 de la plaza Amberes, en el Periférico de Torreón, al ser acusada de presunto fraude.

Cinco afectados, cuyas inversiones oscilan entre 650 mil y 4 millones de pesos, denuncian haber sido engañados con la promesa de significativos rendimientos mediante un esquema de inversión. Hoy, su único anhelo es recuperar su capital.

En la Fiscalía General del Estado, las carpetas de investigación CI 3902/2023, 4247/2023, 2207/2023, 2555/2023 y 4246/2023 han sido ratificadas en contra de Inverforx, quien es señalada de operar con un esquema Ponzi, una estafa piramidal que atrae a inversores pagando utilidades a los depositantes anteriores con fondos de los más recientes.

Édgar Ríos Pérez, abogado de los afectados, explica que la financiera ofrecía ganancias mensuales de 5 a 7 por ciento, llegando en algunos casos hasta un 80 por ciento en un año. ¿Eran estas cifras realistas o simplemente señales de un esquema insostenible?

Ríos Pérez compara el modus operandi de Inverforx con el esquema del Yox Holding, destacando que la empresa justificaba sus problemas de pago con supuestas multas fiscales.

¿Cómo influyeron estas excusas en la confianza de los inversores?

Las víctimas, que entregaron sumas que van desde 650 mil hasta 4 millones de pesos, recibieron «ganancias» iniciales con su propio dinero.

Sin embargo, cuando se suspendieron los pagos por supuestos movimientos internos en la financiera, comenzaron a sospechar. ¿Fue este el punto de quiebre que llevó a las denuncias?

La empresa, según Ríos Pérez, tiene su domicilio en modestas oficinas en la colonia Hipódromo, en La Condesa, Ciudad de México.

¿Podría la aparente discreción de la sede haber influido en la confianza de los inversionistas?

Los afectados temen que Inverforx desaparezca y con ello se pierda su capital. ¿Cuál es la estrategia legal para garantizar la rendición de cuentas por parte de la financiera y sus apoderados legales, quienes se presume ya no se encuentran en el país?

En su intento de buscar soluciones, los afectados acudieron a la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), pero se encontraron con la limitación de que la empresa no está dada de alta.

¿Qué opciones tienen los afectados frente a este obstáculo?

El abogado revela que los supuestos pagarés entregados por Inverforx ni siquiera fueron firmados, siendo solo una imagen sin la firma de los clientes. ¿Cómo afecta esta falta de documentación a la validez de las inversiones y denuncias?

Finalmente, Ríos Pérez hace un llamado a otros posibles afectados para que se informen y se sumen a la denuncia. ¿Podría haber un número significativo de personas involucradas en este presunto fraude, y cómo podría afectar la magnitud del caso a futuras investigaciones?