La reciente muerte de una joven de 22 años en Ciudad de México, cuyo cuerpo fue encontrado en el Estado de Tlaxcala, ha desatado una ola de conmoción en el país y resalta el alarmante problema de la violencia contra las mujeres.
La víctima, Ivana Huato Becerra, desapareció el pasado domingo y su cuerpo fue hallado en campos de cultivo en el camino hacia Ojo de Agua, una localidad ubicada a 150 kilómetros de la capital.
La causa de la muerte fue declarada como «un choque neurogénico secundario a sección medular a nivel C2-C3», que se refiere al corte del suministro de sangre y oxígeno a los órganos debido a daños en el sistema nervioso.
El incidente plantea numerosas incógnitas sobre lo ocurrido entre la alcaldía Benito Juárez y el lugar donde se encontró el cuerpo. Imágenes de cámaras de seguridad han permitido reconstruir parte de los momentos previos a su desaparición.
Huato Becerra fue vista por última vez conduciendo su automóvil negro en la colonia Portales, donde aparentemente dejó a su pareja antes de regresar a su casa en la alcaldía Tlalpan. Sin embargo, la información posterior es fragmentaria y confusa.
La trágica historia sigue sin resolverse completamente. Las cámaras captaron el vehículo saliendo de Ciudad de México en dirección a Tlaxcala.
El coche de Huato Becerra fue encontrado en la alcaldía Miguel Hidalgo, ocupado por un hombre de 27 años y una mujer de 52 años.
La propiedad del vehículo no pudo ser acreditada y se descubrieron sustancias ilegales en su posesión. Se ha informado que estas dos personas tenían relación con la víctima y alquilaban una habitación en la casa de Ivana y su madre.
A través de una orden judicial, las autoridades han cateado la vivienda del detenido, obteniendo indicios relacionados con la ausencia de la víctima.
Aunque el cuerpo de Ivana fue encontrado el mismo día de su desaparición, no se vinculó con el caso hasta varios días después, cuando se confirmaron las similitudes físicas. Aunque se desconoce cómo y dónde murió exactamente, las investigaciones continúan bajo la responsabilidad de la Fiscalía capitalina.
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