• Sheinbaum renuncia a asistir al partido inaugural del Mundial 2026.
• Regalará su boleto 001 a una niña indígena aficionada al fútbol.
• Aún no decide si acudirá al sorteo en Washington.

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, confirmó este martes que no asistirá al partido inaugural del Mundial 2026, que se celebrará el próximo 11 de junio en Ciudad de México. En su lugar, regalará el boleto 001 —el primero emitido para el torneo— a una niña indígena apasionada por el fútbol.

“Es la oportunidad para quien no tiene esa oportunidad, y transforma vidas”, declaró la mandataria, quien aseguró haber tomado esta decisión desde hace tiempo. Sheinbaum reconoció que aún desconoce si los líderes de Estados Unidos y Canadá —Donald Trump y Mark Carney— asistirán al partido en el Estadio Azteca.

Una decisión con impacto diplomático

La ausencia de Sheinbaum rompe con la expectativa de un encuentro entre los mandatarios de los tres países sede del Mundial. La presidenta señaló que, en caso de que Trump o Carney visiten México, se les dará trato de jefes de Estado. Sin embargo, reiteró que todavía es temprano para confirmar quiénes asistirán.

Este gesto se suma a lo anunciado en agosto, cuando la presidenta informó que el boleto 001 sería sorteado entre infancias indígenas con “pasión por el fútbol”. Aún no se ha detallado cuál será el mecanismo para elegir a la beneficiaria.

Aún sin decisión sobre el sorteo mundialista en Washington

Sheinbaum tampoco ha definido si asistirá al sorteo de los grupos del Mundial, que se llevará a cabo este viernes en el Centro John F. Kennedy para las Artes Escénicas, en Washington.
La Casa Blanca ya confirmó la asistencia de Trump, mientras que la presidenta mexicana evalúa si viajar o no a Estados Unidos.

El Mundial llegará a las plazas públicas de México

La mandataria aseguró que seguirá el partido inaugural desde las pantallas gigantes que el Gobierno federal instalará en el Zócalo y en plazas públicas de todo el país para acercar el evento a la ciudadanía. Estas acciones forman parte del programa para democratizar el acceso al torneo.

El Gobierno también prepara inversiones en museos, zonas arqueológicas y servicios turísticos ante la llegada de miles de visitantes que asistirán a los 13 partidos que México albergará en tres sedes: Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey.