• Protestas agrícolas escalan: bloqueos en 22 estados.
• Exigiendo seguridad y precios justos; las declaraciones de Gobernación detonan un conflicto político.
• Sheinbaum dice que no habrá persecución, pero el movimiento advierte: “Si no hay respuesta, volveremos a las calles”.

La relación entre las organizaciones agrícolas y el Gobierno de Claudia Sheinbaum atraviesa uno de sus momentos más tensos. Este lunes, productores del campo, respaldados por transportistas, realizaron bloqueos de hasta diez horas en garitas, carreteras, aduanas y puentes fronterizos, interrumpiendo vías estratégicas en 22 estados. La protesta elevó la presión sobre la administración federal, a la que exigen mejor seguridad en los caminos y precios justos para sus cosechas.

Las tensiones escalaron luego de que la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, descalificara las movilizaciones, atribuyéndoles “tintes políticos” y anunciando la apertura de “carpetas de investigación” contra líderes de los bloqueos. La respuesta del movimiento fue inmediata.

“Decir que hay intereses de partidos políticos es el discurso más tonto que he escuchado”, replicó Eraclio Rodríguez, dirigente del Frente Nacional para el Rescate del Campo Mexicano y exdiputado del PT, aliado histórico de Morena. Rodríguez añadió que los productores “no temen” amenazas de judicialización.

“Si nos encarcelan, mínimo nos van a dar comida, y si nos matan, nos hacen un favor”, lanzó.

Este martes, Sheinbaum intentó bajar la tensión asegurando que las declaraciones de Rodríguez “fueron malinterpretadas” y afirmó: “Nosotros no perseguimos a nadie por manifestarse”.

Los productores reclaman precios y supervivencia financiera

La principal exigencia de los manifestantes es que el Gobierno compre las cosechas al 100% del costo de producción más 30% de utilidad, en lugar del 50% ofrecido por la administración.
“Estamos perdiendo el 50% de la inversión”, explicó Rodríguez, quien señaló que muchos productores están en plena cosecha y urgidos de liquidez para pagar compromisos financieros.

Bloqueos estratégicos paralizaron el país

Los cierres afectaron autopistas clave como la México–Toluca, México–Puebla y tramos de la México–Querétaro, además de puntos en Guanajuato y Aguascalientes.
En Ciudad Juárez, un grupo de agricultores bloqueó por horas el puente internacional Córdova, uno de los cruces más importantes entre México y Estados Unidos.

La Ley de Aguas: un frente secundario, pero explosivo

Aunque el Gobierno federal intentó vincular las protestas a su iniciativa de Ley General de Aguas, los dirigentes aseguran que ese tema no es prioritario.
“La Ley de Aguas no es lo más importante; queremos precios justos”, afirmó Rodríguez.

Aun así, el debate legislativo sobre la ley ha encendido alertas. Morena ha ofrecido ajustes, como eliminar la transmisión de concesiones de uso agrícola entre particulares —lo que obligaría a regresarlas al Estado para su reasignación por la CONAGUA—.
Productores advierten que esto devaluará sus tierras, imposibilitando venderlas o heredarlas.

Las protestas siguen: diálogo sin acuerdos y tensión creciente

Pese a que algunos bloqueos fueron retirados el lunes por la tarde, las organizaciones decidieron mantener la jornada de protestas hasta obtener una respuesta clara.
“No descartamos volver a cerrar carreteras”, advirtieron, acusando que el discurso oficial “no abona a la gobernanza”.

Rodríguez cuestionó directamente la lectura política del Gobierno:
“Ni el PRI, ni el PAN, ni Morena juntos pueden mover a toda la gente que estamos moviendo hoy”.

A pesar del clima de confrontación, los manifestantes confirmaron su asistencia a la mesa de diálogo convocada por el Ejecutivo.
“Estamos dispuestos a dialogar; solo pedimos que cambien su actitud”, concluyó el líder campesino.