• Hospital Universitario exige pago de 26 mdp a Saltillo.
• Heredado de la administración de José María Fraustro.
• La falta de pago afectó la operación del nosocomio y mantiene en tensión la relación con el gobierno municipal.

Saltillo, Coahuila. — La opacidad y el presunto ocultamiento de información por parte de funcionarios municipales envuelven una deuda de más de 26 millones de pesos que el Ayuntamiento de Saltillo, bajo la administración de José María Fraustro Siller, acumuló con el Hospital Universitario “Dr. Gonzalo Valdés Valdés” durante el último cuatrimestre de 2024.

El adeudo millonario provocó la suspensión temporal de los servicios médicos para trabajadores municipales y ha comprometido la estabilidad financiera del hospital, según constató El Coahuilense Noticias mediante solicitudes de información.

Una deuda que dejó huella

El monto total asciende a 26 millones 562 mil pesos, correspondientes a 30 procedimientos médicos no especificados realizados entre julio y octubre de 2024.
En octubre de ese año, el Hospital Universitario detuvo la atención a empleados del ayuntamiento, rompiendo un convenio histórico vigente desde hace varias administraciones.

El director del nosocomio, Lauro Cortés Hernández, reconoció que el impago ha tenido consecuencias graves:

“Nos afecta mucho porque compramos insumos a proveedores a quienes también debemos. Hay un efecto en cadena: el municipio nos debe y nosotros no podemos cumplir con nuestros compromisos”, explicó.

Denuncias internas y presunto pacto para ocultar el adeudo

El problema trascendió a los propios trabajadores del hospital, quienes en septiembre realizaron un paro de labores para denunciar un supuesto pacto entre el subdirector administrativo, Jaime Alfredo Contreras, y el ex tesorero municipal, Juan Carlos Villareal, con el fin de evitar la facturación del último cuatrimestre de 2024.

Los inconformes afirmaron que el adeudo “tiene en quiebra al hospital”, y acusaron a la administración municipal actual, encabezada por Javier Díaz, de negar el reconocimiento del pasivo bajo el argumento de que las facturas “no se entregaron a tiempo”.

Hospital Universitario desmiente versión del Ayuntamiento

La secretaria técnica y jurídica, Hilde Martínez Dávila, desmintió esta versión y aseguró que las facturas fueron entregadas en tiempo y forma al entonces director de Salud Pública Municipal, Luis Alfonso Carrillo González.

“Mensual y semanalmente se enviaba toda la información con las pruebas de los tratamientos realizados. Todo está recibido y sellado por el municipio”, afirmó.

Además, señaló que por contrato el ayuntamiento cuenta con un médico verificador que constata la atención médica y valida los cobros del hospital.

El Coahuilense Noticias obtuvo copia de más de 16 facturas selladas y un oficio dirigido al municipio que solicita formalmente el pago del adeudo de 26 millones 562 mil 184 pesos, advirtiendo que la falta de liquidez afecta la operación del nosocomio.

El Ayuntamiento se deslinda

Tras la publicación del reportaje, el Ayuntamiento de Saltillo aseguró que el presunto adeudo no constituye una obligación formal de pago para la actual administración.
Argumentó que, de acuerdo con la Ley de Entrega-Recepción de Coahuila y la Ley General de Contabilidad Gubernamental, solo se reconocen como pasivos aquellos debidamente registrados en los sistemas contables.

El municipio informó que en febrero de 2025 realizó un pago de 9 millones de pesos al hospital, correspondiente a los servicios prestados durante noviembre y diciembre de 2024, pero negó tener registros de deudas anteriores.

“Cuando recibimos la administración, no había ningún pasivo contable con el Hospital Universitario”, declaró el alcalde Javier Díaz González.

Sin diálogo ni solución

Aunque la actual administración ha cumplido con los pagos recientes, el adeudo heredado no ha sido liquidado ni se ha logrado establecer una mesa de conciliación.

El director Lauro Cortés afirmó que, por instrucción del rector de la Universidad Autónoma de Coahuila, Octavio Pimentel, existe disposición al diálogo, pero la situación financiera del hospital sigue comprometida.

“Estamos en la mejor disposición de revisar y conciliar, pero el hospital está en una situación muy complicada. No hablamos de construcción, hablamos de atención médica”, subrayó.

Mientras el municipio mantiene su negativa a reconocer la deuda, el Hospital Universitario enfrenta una crisis interna que pone en riesgo la continuidad de varios servicios y el pago a proveedores.